LIBRO DE FERÍA 2017

MINER@S POR EL MUNDO OS DESEA UNA FELIZ FERÍA 2017.

LA POBLACIÓN DE VILLANUEVA DEL RÍO (VILLANUEVA DEL CAMINO).

 

HISTORIA DE UN PEQUEÑO PUEBLO CON MUCHÍSIMA HISTORIA SOBRE SUS ANCESTROS.

Historia de un pueblo que pequeñito que para algunos no deja de ser una villa, como si esta no tuviera una larga y fructífera Historia detrás. Este pueblo se llama actualmente Villanueva del Río (Villanueva del Camino) en la antigüedad, con una Historia que viene del siglo VIII a. C. al menos, como los pueblos del (Cerro de la Encarnación), de Villanueva del Río (Villanueva del Camino), y M de Setefilla en Lora del Río y Carmona, lo que hizo que estos núcleos poblacionales de la Vega Norte de del Guadalquivir construyeran fortalezas naturales desde la que dominaban los caminos que conducían al Interior de la Región y al propio Río.
Los emplazamientos desde la era de finales del Bronce tartésico, se asentaban en zonas elevadas, aunque no era definitoria esa característica. Lo que si lo fue es la proximidad a las corrientes fluviales, o vías marítimas y terrestres, que se intercomunican con los puntos metalúrgicos más próximos de las zonas.
Durante esta época, el poblado de Setefilla, poseía un alto valor estratégico en la que predominaba el alto valor de los recursos agrícola y ganadero, en la que se cruzaban numerosas vías de comunicación.

La población de Setefilla, está rodeada de una pequeña fortificación, rodeada de unas fuertes murallas, lo que da lugar a la seguridad para el intercambio de los productos del valle.
Villanueva del Rio, cuyos antecedentes más remotos conocidos son de la época Romana, según el nobiliario oficial y la Antigua Naeva romana, perteneciendo ésta a la demarcación de Flavia (Lora del Río) donde al parecer se pagaba peaje de paso o Arbitrios, por el paso de las mercancías, como el aceite, y el trigo, principalmente por el río Betis (Guadalquivir), es destacable por aquella época el Santuario de Munigua, (Municipium Flavium Muniguensis) como centro administrativo de primer orden en la comarca entre los siglos I a III d. C. y que en la franja montañosa de Córdoba (Corduba Cástulo) vía de comunicación de unos quinientos kilómetros para potenciar las explotaciones mineras de la zona de Sierra Morena con producciones de hierro en los siglos IV a II a. C.
Villanueva del Río (Villanueva del Camino), fue escenario de guerras entre Bizancio y el Reino de los Visigodos.
En el 740 aproximadamente en esta población se asentó una familia bereber de los Abadíes que gobernaban Sevilla, y paso a denominarse en árabe (Billa Nuba al-Bahirinyyín) donde acampó el emir Omeya se llamaba Abderraman I al-Dájil, cuando iba camino de enfrentarse al último Gobernador de Córdoba (Al-Andaluz) Yusuf b. alqutiya.
Y fue en este lugar donde se instauró la bandera del Al-Al-Ándalus, al colgar éste un pañuelo (turbante) sobre una lanza. Adoptándola desde entonces como enseña.
Ya, en 1264 expulsados los mudéjares de Sevilla y Córdoba, quedando despobladas la aldeas y alquerías de la comarca, lo que se tuvo que volver a repoblar por parte de la corona.
Alfonso X el sabio eximió del pago del derecho de barca a Villanueva del Camino (Villanueva del Río), así como a Carmona, y Alcolea, por el tránsito de mercancías hacia Constantina, Cazalla de la Sierra, El Pedroso.
En el siglo XIV y XV, existió una barca de unos 20 metros de larga por 16 de ancha, con capacidad para unas 40 a 50 personas, posteriormente se formó en Sevilla, la denominada “Comunidad de Villa y Tierra” para aprovechar los espacios comunales de las poblaciones de Alcalá del Río, La Rinconada, Villa del Río (del Camino) donde podía pactar el ganado libremente.
El 29 de Abril de 1.570, se hospedaron en Villanueva del Camino los Príncipes de Bohemia y de Hungría, cuando acompañaban al emperador Felipe II en su viaje a Sevilla.
En 1.612 se casó la cuarta Marquesa de Villanueva del Río Doña Antonia Enríquez de Ribera, con Don Fernando Álvarez de Toledo Duque de Alba. Concediéndoles Felipe II la explotación de los filones carboníferos, trasladando estos a la Fundición de Armas de San Bernardo de Sevilla.
Ya en el siglo XVIII, El Duque de Alba y Señor de Villanueva del Camino, fue el que mayores ingresos al obtener de una de las tierras más fértiles dela Península, Cereales, ganadería, ampliando Olivares en los términos cercanos de Alcolea del río, Tocína, así como por el abastecimiento de la pesca fresca, en la que suministraban a los pueblos cercanos, como eran el Barbo, Bogas, Sábalos, Albures y Esturiones, llegando en pequeños faluchos a la vega de Cantillana y de Alcalá, y el carbón de su explotación.
El 17 de Julio de 1.718 se incendió el palacio de Villanueva, recuperándolo la casa de Alba, a su antiguo esplendor, hasta que fue puesto en manos privadas. (Aún quedan restos del antiguo palacio.
Entrado el siglo XVIII-XIX, Carlos III concedió una cedula de explotación mediante Cédula Real de 1780.
El 28 de Abril de 1.904, se produjo un accidente en el Pozo 4 que costó la vida a 61 mineros, se abrió una Suscripción Real de 15.000 pesetas y el Consejo de Ministros presidido por Antonio Maura y Montaner, acordaron que girara una visita el Rey Alfonso XIII, vetada esta por el Jefe del Gobierno Alejandro Lerroux, que efectuó la visita a las Minas, quedando impresionado por las condiciones precarias en las que trabajaban los mineros fallecidos.
En 1.905 la compañía se hizo con el control absoluto llegando a anular el poder político.
La vida Municipal y las competencias judiciales estaban influidas por la Dirección de la Compañía de las Minas, representadas por el Ingeniero Jefe y otros de la Compañía de Ferrocarriles M.Z.A.
Al año siguiente fueron robados los sellos oficiales de “Villanueva del Camino” y llevados a la nueva población de Villanueva del Río y Minas, trasladando el poder económico, lo que creo una serie de disputas entre las poblaciones que a día de hoy perdura.
En el año 1.911 en el Congreso de los Diputados, se trataron de las acusaciones sobre los abusos y persecuciones de la compañía minera, Intercediendo por ellos Pablo Iglesias como fruto de las conversaciones que mantuvo este con el vecino de Villanueva Hipólito Guerrero y el Diputado por Sevilla del Partido Socialista.
La huelga de obreros de 1.912 la compañía despidió a 701 mineros incluidas las familias a su cargo, instándoles a abandonar “Las Minas de la Reunión” en total fueron expulsados 2.500 personas a las que se les puso como medida coercitiva tres puntos.
1. Suspensión de créditos en el Economato.
2. Sustitución del personal huelguista.
3. Desahucio de las casa de la compañía, por la fuerza y el inmediato éxodo de los mineros con sus familias.
4. Ya en las elecciones del 12 de Abril de 1.931, que provoco el advenimiento de la II República, por aquel entonces el censo eran de 1780 personas, pero la persistencia caciquil de la dirección de la empresa. Igualmente ocurrió en Alcolea del Río, Tocína y Villaverde.
El 20 de Junio de 1.936 a las 19; 15 horas tuvo lugar otro accidente en la Mina, dando como resultado un total de 10 Mineros fallecidos y dos heridos graves.
El 7 de Agosto de 1.936, salieron de Sevilla dos columnas al mando del Coronel Tello y del Comandante López Guerrero, cada una con unos 600 soldados con artillería, ocupando ese mismo día las localidades de Alcolea y Lora del Río.
En 1.939 se construyó el primer pozo y depósito de agua potable para el pueblo.
En 1.952 se cubrió de Hormigón el Puente de Hierro.
El 27 de Septiembre de 1.967, a las 19,30 horas se produjo un hundimiento en el Pozo 4, entre los pisos 15 y 16 con el resultado de tres Mineros fallecidos.
El 13 de Octubre de 1.969 a las 21,30 horas, se produjo una explosión de grisú en el Pozo 4 en el piso 15 lo que provocó quemaduras graves a 16 Mineros que fallecerían en los días siguientes.
Hasta su cierre en el año 1.972, por fortuna no se produjeron más accidentes.
El pueblo de Villanueva del Río (Villanueva del Camino), se constituyó en entidad autónoma local, sobre la solicitud hecha por Don Juan José Quesada, colgándose en le tablón de anuncios del Ayuntamiento de las Minas, el 22 de Febrero de 2.005. Siendo la Alcaldesa la señora María José Cervantes Medina.